Todos los jugadores de managers de futbol virtual tipo fantasy
opinan de, critican, celebran, sufren las decisiones (exentas de intención) de los
periodistas del diario AS que puntúan a los futbolistas en los partidos profesionales
del deporte rey. Se denominan cronistas, puesto que redactan la crónica que narra a grandes rasgos
los acontecimientos ocurridos sobre el terreno de juego.
En esta ocasión vamos a realizar lo que nadie ha hecho hasta la fecha: meternos en la piel de un cronista.
Tan sencillo y tan complejo a la vez, vamos a intentar la tarea que en su dia nos explicó el ex-cronista
del Real Madrid: Juanma Trueba en el podcast 3x18
En dicha entrevista comentó que observaba como se desarrollaba la 1a parte del encuentro siguiendo a los jugadores.
Mientras que durante el transcurso de la 2a redactaba la posible crónica, sin cerrar, a falta de algunos
detalles todavia no sucedidos. Es decir, que redactaba los vaivenes vividos hasta el momento a la vez que
seguia de fondo el partido y decidia las picas(o no) finales de los implicados.
Además usamos el criterio que en su dia nos explicó en tuits enlazados el cronista del málaga Carlos Cariño . Partir de la base que todos los jugadores
tenian una pìca y dependiendo de los sucesos acaecidos subian o bajaban la puntuación.
Y el cronista a emular va a ser uno de los mas dificiles por su exigente criterio:
http://www.twitter.com/josanespina ,
en el partido que abria la jornada 4 de la Liga Santander, el Betis - Granada.
Ademas de observar el partido, redactar la crónica y elegir las picas, Jose Antonio Espina tiene la bondad
de ir narrando su opinión en directo de las jugadas más destacadas via twitter y
adelantando las picas de los jugadores sustituidos o expulsados. Para todos esos periodistas que sufren/disfrutan
las contestaciones de los jugadores mas apasionados va dedicada la alter-crónica y las picas del partido
Betis 2 - 2 Granada de la jornada 4.
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Adán y Ochoa salvan a sus equipos en un partido con decisiones polémicas"
El Benito Villamarín recibía a un Granada necesitado de puntos, confianza y resultados, pilotado por un Paco Jémez
con extensa plantilla pero sin equipo claro, que buscaba reencontrar en la ciudad de la Torre de Oro aquello que poseía
en Vallecas: efectividad en ataque. Los granaínos con un punto en tres jornadas necesitan encontrarse a si mismos.
Por su parte Poyet preparaba el encuentro con un once defensivo en el centro
del campo y con alguna baja en ataque que a la postre suplirían con creces los atacantes titulares.
Comenzó la lucha y el Betis buscaba las bandas para llegar al area de Ochoa, pero con poca efectividad.
La defensa del Granada no estaba todavia ubicada con su portero pero resistían el envite de Ruben y compañía.
Parecía claro quién llevaba la batuta en la orquesta sobre el prado, pero sorprendentemente apareció un
Carcela-González inesperado por la defensa verdiblancos y en el minuto 12' se convertía en el más listo de la clase,
batiendo de tiro cruzado a un Adán que ni siquiera estirandose podía alcanzar el esférico.
Los dos bandos se atascaban en el centro del campo sin ideas claras y solo algun centro de Tabanou sobrevolaba el
area rival sin destino claro. Un Tabanou que acabaría haciendo un trio cabeza-codo-cabeza con Alex Alegría y acabaría
siendo sustituido por Tito. Todo parecía desordenado y opaco en las cabezas de los 22 atletas cuando, de repente,
volvía a crear peligro cerca del area el goleador de la noche y un balón suelto lo pescaba Alberto Bueno y marcaba
con otro tiro cruzado. 0-2 y el Granada sacaba petróleo de sus individualidades con mas calidad que orden.
Poyet reordenaba sus ideas y metía a Musonda por Fabían para oxigenar el mediocampo y nutrir de balones a los
atacantes del Betis.
Dicho y hecho, Ruben Castro se convertía en asistente y amoldaba el balón a la cabeza de Alex Alegría que lo ponía
en las redes de Ochoa. Volvía a haber partido antes de llegar al descanso.
Al retorno del tunel de vestuarios el partido iba a tomar una revolución más y ruben Vezo se iba a marchar a la calle
con dos tarjetas en tres minutos, quizá rigurosas, quizá justas, que dejaban al Granada con 10 y Paco metía a Angban por Bueno
para cubrir la banda que dejaba huérfana Vezo. Esto dejaba al Betis comandado por Castro anchura de espacios e ideas
para darle la vuelta al marcador y al Granada flotando agarrado a un tablón esperando que llegase alguien al rescate.
En uno de esos ataques Piccini asistía a Alegría que dejaba tumbado a Khrin y elevaba el tiro marcando el empate.
No paraban de sucederse ataques del Betis y cada disparo de Ruben se emparejaba con un bloqueo del Memo Ochoa. Y a
la contra montada por el Granada con un control pecho-mano se iba a crear la gran polémica de la noche: supuesto penalty
de Adán a Atzili, que parecía tocar balón. Amarilla para el portero que se colocó delante de Ezequiel Ponce
y atajó su disparo salvando a su equipo de la derrota, y los posteriores rechaces con ayuda de la defensa.
Un resultado quizá lógico pero no justo el empate, entre dos equipos que tienen que mejorar la organización en defensa unos
y la efectividad en ataque otros para llevarles más allá de la zona media-baja que ocupan.
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